El Parque Lumpini es el sitio ideal para escapar del ruido y el estrés de las grandes urbes. El primer parque público de Bangkok se ha convertido en el paseo necesario para personas de todas las edades. Un lugar de respiro, de esparcimiento… senderos, un lago artificial, naturaleza que abraza.
El Rey Rama VI fue el creador del magnífico parque en el año 1.920 y utilizó para su construcción las tierras de la familia real. Tras la culminación de la Primera Guerra Mundial el Rey decidió poner 58 ha de sus patrimonio a disposición de la gente de su pueblo. El objetivo era brindar a los ciudadanos un espacio en el cual conectar con la naturaleza y descansar por unos momentos de la vorágine de la metrópolis.
Durante la Segunda Guerra Mundial el Parque Lumpini fue utilizado como lugar de campamento para el ejército japonés. Su nombre fue puesto en honor al Buda de Nepal y rápidamente se ganó el afecto de tailandeses y turistas del mundo entero.
Lo fundamental es encontrar una superficie verde de oxigenación en medio de edificios y construcciones típicas de la ciudad. El contraste ideal entre vida natural y el ritmo ajetreado de las grandes ciudades en las cuales las personas corren, se topan unas contra otras y sienten que el espacio y el tiempo jamás son suficientes.
Las rutinas de ejercicios físicos son tendencia en la vida moderna para mantener una vida más saludable. Pues, el Parque Lumpini ofrece los espacios para hacer caminatas, salir a correr e incluso participar de clases gratuitas de yoga, danzas y otros al aire libre. Todo está planificado para generar la mejor experiencia de sus visitantes.
En su centro podemos visualizar un hermoso y tranquilo lago artificial que colabora aún más con la relajación. Hay, en el lugar, puestos para arrendar botes y pasear por el lago con los lagartos gigantes que viven allí. Como consejo, observarlos de lejos y no ofrecer comida a los mismos pues podrían ponerse agresivos.
Hacia la entrada suroeste del parque podemos observar una estatua del Rey fundador. Una buena oportunidad para tomar una fotografía con un integrante de la realeza que pensó en el pueblo. De igual manera, en diferentes espacios encontraremos otras imágenes esculturales.
Muy cerca de la estatua del Rey se ubican diferentes puestos de comidas en los cuales se pueden degustar platos típicos y diversos sandwichs. Además los zumos de frutas y bebidas refrescantes son los preferidos de quienes finalizan sus rutinas físicas en el Parque Lumpini.
Algunas familias eligen el pulmón de Bangkok para realizar un picnic en sus días libres. Los niños cuentan con un espacio abierto para jugar e incluso hay una pista de baloncesto en la cual se realizan competencias.
El fabuloso parque se encuentra en pleno centro de la capital de Tailandia. Por ende, es muy sencillo acceder al mismo e incluso la mayoría llegan caminando. Asimismo, también existen en la ciudad taxis y trenes con estaciones muy cercanas al parque.
Luego de conocer el centro financiero de la ciudad de Bangkok es prácticamente una obligación caminar hacia el Parque Lumpini para bajar los niveles de ansiedad. No se pierdan la experiencia de realizar ejercicios con personas totalmente desconocidas o simplemente sentarse a observar la tranquilidad del lugar.
Enamorado de los viajes y fotógrafo aficionado. Mi pasión es viajar, pero siempre acompañado de mi cámara. Como unión de estas dos cosas nació Viajeros por el Mundo!
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