Y ya tras esto nos fuimos yendo tranquilamente, encantados porque aquellas primeras horas en Magic Kingdom, habían sido increíbles.
Volviendo al hotel nos pasamos el desvío hacía el nuestro, y nos salimos del territorio Disney, y nos costó un buen rato poder dar la vuelta. El resto de noches ya nos fijamos y no nos pasamos el desvío.
Ya por fin, volvimos al hotel y fuimos directos a cenar algo rápido; también nos compramos el vaso rellenable, que vale 15 $ y que puedes rellenar todas las veces que quieras durante tu estancia de agua, refrescos, café, chocolate y alguna cosa más.
Y sin perder tiempo a la cama, que mientras llegas a la habitación hay tiempo de bajar la cena. Mañana queríamos llegar a la apertura de Magic Kingdom.
